Una batería de automóvil es una parte importante del sistema operativo de un vehículo. Se cree que la invención de la batería data de la década del 250 a. C. El desarrollo de la primera batería moderna se le atribuye al italiano Alessandro Volta, inventor, quien presentó la primera celda de batería en seco en 1800. En 1860, un físico francés llamado Gastón Plante, presentó la primera batería de plomo ácido. Su batería recargable fue considerada un precursor de la tecnología de «celda húmeda».

Durante la década entre 1970 y 1980 del pasado siglo, la batería de ácido de plomo utilizada en los automóviles se perfeccionó y como resultado se fabricaron las de malla de fibra de vidrio absorbente (AGM), utilizadas hoy en las baterías de mucha calidad. Así, en este progreso histórico de las baterías, es que nos inspiramos para poder narrar el desarrollo de nuestra compañía Toyopardo S.R.L.

Como antecedentes históricos paralelos a este crecimiento tecnológico, podemos señalar que toda la travesía del Sr. Froilán Pardo se inicia en la década de los años 80 del siglo pasado. Más precisamente el año 1980, cuando empezó a trabajar en la compañía HANSA Ltda., en el laboratorio de control de calidad de la línea de baterías BOSCH, como su encargado; durante 5 años, vale decir hasta 1985.

Paralelamente, el Sr. Froilán Pardo entró a cursar sus estudios en la Carrera de Auditoría de la Universidad Mayor de San Andrés. Su trabajo y múltiples ocupaciones hacían que ese tiempo requiera mucho sacrificio. Además, como anécdota en ese tiempo tuvo que desempeñar su trabajo como Secretario, Mensajero, Auxiliar de Contabilidad de Costos y Cajero, a su cargo estaban alrededor de 80 personas.

También cursaba sus estudios en el INCOS, donde tuvo como mentor al rememorado teniente Armando Palacios y allí culminó su carrera como Contador.

Ya en 1988, renunció el Contador de costos del Depto. de la Fábrica de Baterías Bosch de HANSA Ltda. y Don Froilán Pardo pasó a ocupar ese cargo, presentando su primer Balance Oficial en Julio de ese año. Por referencias, se enteró que existía una fábrica de Baterías marca TOLLO, desde 1987. Obviamente era un producto de mala calidad, que no gozaba de prestigio y se iba al rotundo fracaso. Es así que el Sr. Víctor Hugo Jimenez, principal ejecutivo de BATEBOL, invita a Don Froilán a un viaje a Santa Cruz para hacer un diagnóstico a la fábrica en cuanto a sus operaciones, procesos de control de calidad además de la parte de gestión productiva.

.

.